jueves, 19 de julio de 2012

La Psique de las Organizaciones (2): CDC

Vivimos días febriles. El mundo se agita, se despierta. Se levantan las alfombras y sale lo que sale. Se abren los armarios y se ve una buena parte del ropero e, incluso, de la ropa interior y de los cajones, cosas que no suelen estar a la vista del común de los mortales. Ahora le toca a Convergència Democràtica de Catalunya, con una acusación de corrupción que le cae en un momento muy interesante que luego comentaré.

Me llama la atención, y no cesa, de que partidos que dicen defender la democracia no se abran a la sociedad a la que dicen representar. Lo cual quiere decir que los partidos, todos, insisto, son maquinarias al servicio de unas familias. Por lo tanto, no es mi intención denunciar a un partido determinado sino expresar mi enfado por cómo se ha llegado hasta aquí.
En otro post hice un comentario relativo al PSC, indicando cómo es posible que un partido pueda funcionar de cierta manera y sobrevivir. La ideología que cada partido dice tener añade más patetismo al asunto.

Las organizaciones son seres vivos que reflejan en su modo de funcionar las circunstancias en medio de las cuales fueron creadas. La impronta fundacional de aquel momento da carácter, personalidad y temperamento. Es así como la historia va siendo labrada, a partir de dicha impronta, cuya influencia se extiende y se desarrolla a lo largo del tiempo. La energía del momento queda depositada en la psique de la organización.

Explicación astrológica.

En el mapa fundacional de CDC, a diferencia de lo que sucedía con el PSC, el liderazgo está muy bien situado. El Sol, el lider, la luz, está en el transformador Escorpio, un signo de agua que la astrología antigua calificaba como mudo. La mudez, en este caso, es un recurso utilizado con toda conciencia.
El ascendente en Tauro tanto puede referirse a la defensa de unos valores ligados a la tierra, pues es un signo de ese elemento.

Lo curioso es la cuadratura formada entre Luna y Plutón, situados ambos en el cuadrado cardinal. Esta cuadratura es precisamente la que estos días ha sido reactivada por la actual cuadratura entre Plutón y Urano, que nos lleva de cabeza desde el 2008 y que no nos abandonará prácticamente en toda la década. Justamente ayer, día de la notificación de la denuncia, Marte llegó a la posición natal de Plutón en el mapa de CDC. Libra, el signo de la justicia, es reactivado agudamente por el planeta rojo, tan marcial él. Ni que decir tiene que el Plutón de ahora mismo ha llegado lentamente a la posición natal de la Luna en Capricornio, por cierto, nada favorable para los tiempos venideros. Va a haber sufrimiento hasta el 2015 como mínimo, con periodos de flujo y reflujo.

Por cierto, una cuadratura entre Luna y Plutón acostumbra a señalar maniobras opacas de despeñamiento, de venganza, de algo que germina a oscuras a la espera de una acción contundente y masiva. Ayer fue un día en el que se inició, o se hizo público, una de estas acciones. El asunto es que todo lo tocado por Plutón hace referencia a algo que sucede en el mismo interior de la organización.
Por otro lado, el significado profundo que tiene este aspecto es que, aunque puede haber un anhelo de contacto con el pueblo, lo que comandan las emociones es la preservación de los privilegios de una élite, los cuales son defendidos de un modo poco transparente. Es una contradicción muy de fondo que tarde o temprano acaba poniéndose de manifiesto por el bien de todos.

Los aspectos Júpiter-Quirón, situados en el mapa de CDC en el área de proyectos y finanzas, están muy reactivados en esta etapa. Ello supondrá la puesta en marcha de todos los recursos comunicativos orientados a saldar la parte que corresponde a la reversión de la opinión pública creada.

Y el aspecto Quirón-Saturno, más importante en organizaciones de lo que se creía, marca una tendencia a marginar o excluir a determinadas personalidades, especialmente aquellas que saben de la misa entera. Y hay un rastro de ellas en la trama. Eso prueba que el respeto por la memoria histórica sigue siendo una asignatura pendiente.

No hay comentarios: