La habitación de Capricornio

La habitación de Capricornio.

Una metáfora acerca de los tiempos que corren.

x Jesús Gabriel, un astrólogo de Barcelona.

Algunos de los post de este blog contienen argumentos mordaces. O eso parece, a tenor de los comentarios que me llegan. Y nada más lejos de mi intención. Tan sólo expuse la realidad que percibo, la cual, dicho sea de paso, no me parece nueva por más novedosa que sea la faz con que se nos presenta.

Una forma de monitorizar los acontecimientos, para poder hacer con ellos una prospección acerca del futuro, es a través del conocimiento de los ciclos. Y para ello no hay una herramienta más interesante que la astrología.

Como gran parte de los comentarios recogidos en otros posts tienen como protagonista al tránsito de Plutón por Capricornio, paso a exponer cómo son las tripas del susodicho signo.

En la habitación de Capricornio se aloja un huesped de lujo: Plutón, el gran petador de burbujas.

Tomémoslo como si se tratara de una habitación: la habitación de Capricornio.

El gran edificio que es el zodiaco está formado por 12 grandes estancias, cada una albergando una idea-fuerza universal. Según quién entra en cada una de ellas, irá percibiendo y haciendo visible una capa más o menos profunda de realidad, un registro de esa idea-fuerza. En este caso, quienes entran y salen son los planetas o, mejor, trazas nuestras que también están en ellos. Ahora mismo está hospedado Plutón, un tipo minúsculo capaz de meterse por cualquier rendija de esa estancia como si se tratara de un agente secreto. Como Capricornio personifica el poder social, la visita de Plutón puede ayudarnos a ver cómo funcionan los asuntos mundanos, sociales y políticos con una profundidad poco habitual y con un lujo de detalles difíciles de captar en cualquier otro momento.

Como decía, Plutón está de visita en esa estancia desde el 2008 hasta el 2023, etapa toda ella caracterizada por un regiramiento de todas las opacidades del poder. Y no es que no se supiese antes, es que ahora vemos cómo se las ingenia con mayor claridad. Y eso que a día de hoy no ha llegado a recorrer ni un tercio de esa estancia.

Pues bien, cada signo puede ser dividido en trocitos, de tal manera que los sucesivos pasos por cada uno de ellos va desglosando los significados y aportando nueva comprensión. Así, pues, le toca el turno a Capricornio.

División en 3 partes.

Una forma de comprender lo que acontece en esta habitación es dividiéndola en tres ambientes: el recibidor, el salón central y el mueble que vemos al fondo. Cada uno de estos ambientes es denominado tramo o decanato. Vamos a ellos.

En el recibidor (2008-2013), justo cuando Plutón empezó su tránsito por Capricornio, nos encontramos con unos trileros que juegan e invitan a que otros participen con ellos. De repente, alguien alza la voz y dice que son estafadores. Se arma un revuelo. En ello estamos.

En el salón (2013-2018) hay una reunión en la que se está decidiendo algo importante con mucho sigilo, tanto que a la que ven que alguien se acerca les sueltan una información tan contradictoria que no hay manera de entender nada. Ni tan sólo los expertos saben de qué va el asunto, aunque todos ellos, eso sí, se maquillan, y lo maquillan todo, para aparecer ante el público como si supieran de qué va el asunto. Muy probablemente esta etapa esté marcada por una carestía alimentaria global.

Al final de la habitación (2018-2023) tenemos un mueble cuyas puertas aparecen cerradas con llave. Dicen que en él hay guardada una información secreta que contiene todas las razones del por qué pasa lo que pasa.

División en 5 partes.

Otra forma de dividir la habitación es haciendo de ella 5 partes. Esta división nos ofrece una información más sutil.

En la primera (2008-2011) nos encontramos con la caída de los valores y la consiguiente situación económica y financiera.

En la siguiente (2011-2014), los argumentos que los especialistas propagan a través de los medios de comunicación, y que vamos repitiendo sin saber lo que quieren decir.

El tercer tramo (2014-2017) está dedicado a la pedagogía, a la didáctica, al adiestramiento y al establecimiento de la ideología que va ser dominante a partir de entonces. Esta etapa va a ser la más confusa de todas, puesto que se solaparán en ella explicaciones de todo tipo: desde aquellas que se venían produciendo a otras que están por producir.

El cuarto (2017-2021) es el de las guerras abiertas por la hegemonía mundial, de acuerdo con las directrices y consignas surgidas en el tramo anterior. Se trata de una etapa muy conflictiva. La élite decadente no aceptará que una élite de nuevo cuño les saque del mapa.

El tramo final (2021-2023) refiere al momento en el que las leyes que deberán regular la transición a un nuevo orden mundial quedarán bien definidas.

No se preocupen, que no nos vamos a aburrir.