Me llamaron la atención por su agudeza, su inteligencia, sus vidas, sus capacidades, sus procesos. También, cómo no, sus paradojas. O, más bien, las paradojas con que los mortales de a pie vemos a George Soros y Mario Conde. Ambos han tenido, y tienen, mucho dinero entre las manos. Ambos han tenido la posibilidad de poner patas arriba el sistema económico y financiero de un país entero. Ambos se proclaman ayudadores de la sociedad o filántropos. También son ávidos lectores de temas no económicos: filosofía, espiritualidad, ciencia, religión, misticismo. Ambos han estado inmersos en la cultura del dinero y ambos parecen estar embarcados en proyectos de ayuda a la sociedad. Al menos eso dicen. Es obvio que para hablar de las podredumbres del poder y tirar de la manta hay que haber estado muy adentro y tocando teclas potentes. Ellos dos cumplen con esa obviedad. Me pregunto yo si alguien que no ha tocado esas teclas puede entender cómo hacer caer el sistema, para ponerlo en evidencia y contribuir a edificar uno mejor y más sano. Eso es lo que supuestamente sostienen estos señores.
Los dos tienen en común que tienen muy fuertes los signos de Virgo (pragmatismo para convertir valor en dinero), Leo (poderío para encarnar el carisma que les lleva a tocar esas teclas) y Escorpio (transformación tras haber puesto al descubierto algo que los demás no podían o no querían ver).
Por su ascendente en Escorpio van a estar pasando Marte, el de la guerra, y Saturno, el del Karma de las decisiones, algo que no ocurre todos los días. Por otro lado, Saturno va a estar apretando fino a los leoninos, y ellos dos lo son, durante estos dos próximos años.
Por cierto, una pregunta: ¿Puede un tiburón convertirse en otra especie distinta de la que es?
1 comentario:
He visto otras cartas de Soros y no se sabe su hora de nacimiento, lo del asc escorpio no lo veo apropiado, júpiter y plutón están separados de orbe, pero sería plausible en casa 2, de las grandes fortunas como lo tiene bil gates, en lo demás, no es comparable con Mario conde en nada.
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